INGREDIENTES:
- Una lámina redonda de hojaldre
- 200 gramos de espinacas congeladas cortadas
- Una cucharada sopera colmada de avellanas tostadas molidas
- Un huevo100 gramos de queso de cabra en rulo
- 100ml de nata liquida para cocinar
- queso en hilos
- Pimienta molida
- Sal
Descongelar las espinacas en el
microondas.
Poner un chorrito de aceite en una sartén
y calentar. Rehogar las espinacas unos minutos. Espolvorear con la pimienta
molida y salar al gusto.
Precalentar el horno a 200º.
Abrir la lámina de hojaldre y extenderla
sobre una bandeja de horno previamente cubierta con un papel de horno
antiadherente.
Con el borde de un cuenco puesto boca abajo marcar un
redondel en el centro de la masa de hojaldre para formar la corona. Dividir ese
centro en ocho triángulos.
Cubrir el resto de la lámina de hojaldre con queso en hilos.
Repartir por encima las espinacas.
Espolvorear con las avellanas molidas.
A continuación con una cuchara ir regando
con la nata liquida por todas las espinacas.
Cortar el queso de cabra en rodajitas
finas y estas a su vez partirlas por la mitad y
repartirlas por encima de la corona.
Doblar
los triángulos de hojaldre del centro por encima de la corona uniéndolos
con los bordes que levantaremos un poco.
Batir el huevo.
Con un pincel untar por toda la corona.
Meter en el horno a media altura y hornear con ventilador
durante 20 minutos hasta que esté bien
dorada.
Sacar. Dejar enfriar un poco y ponerla
sobre una fuente redonda.
Se puede comer caliente o fría.
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